Tras pasar el fraccionamiento de los 12 metros llegamos al inicio de los 22 que son un disfrute para quien lo baje. Tras un buen rato dando vueltas por la sala principal, y buscando la continuación nos dimos la vuelta para que no se nos hiciese denoche en el exterior.
La subida del pozo principal ya es otra historia, el esfuerzo es mayúsculo pero al final merece la pena.